Lascano Marcelo: – Doctor en Derecho y Ciencias Sociales – Economista
MHG: El Dr. Marcelo Lascano nos decía exactamente el 22 de diciembre de 2007, a propósito del entonces ministro de Economía Lousteau, que era un joven por el cual sentía simpatía, pero que a veces “los jóvenes pueden comerse algún garrón”. Fue lo que sucedió?
ML: Creo que no. Generalmente cuando uno es joven, y todos los fuimos, hay un optimismo existencial, salvo casos de excepción, en algunos casos patológico. Pero en alguna medida uno cree que puede más que lo que realmente puede. No evalúa las circunstancias, los personajes de alrededor, cree que puede doblegar las dificultades, “a mi no me va a pasar”. Pero creo que Lousteau cumplió bien su tarea, fue fiel a sus convicciones, creyó en el rosario de cosas que propuso, le dijeron que no, por ejemplo a enfriar un poco la economía. Es muy probable que la economía se enfríe sola, pero la Administración piensa que no hay que decirlo, que puede venir algún ajuste de la economía mundial… digo yo… Las circunstancias le fueron adversas. Al igual que volver al tema del Indec, que irrita mucho a Moreno, quien parece ser el Non Plus Ultra de este gobierno, que sirve por supuesto, pero no sirve para generar confianza por la sencilla razón que la gente del país o del exterior que tiene títulos ajustables por CER, no le cree a Moreno, y los títulos se caen, es bueno comprarlos porque algún día habrá que sincerarlos, pero yo no lo aconsejo porque si no lo corrigen, me van a correr a mi… Lousteau hizo lo que pudo, con bajo perfil, no hizo ruido, yo diría un chico bien.
MHG: Conoce el nuevo ministro Carlos Fernández?
ML: No. Con Lousteau estuvimos en una mesa redonda en la CGT, Moyano mediante, estuvimos un rato largo, platicando como dicen los americanos, antes y después; pero al ministro nuevo no lo conozco…
MHG: El diario Perfil de hoy editorializa en su tapa mostrando que quien verdaderamente asume en Economía es el ex presidente Kirchner. Pareciera que pesa fuerte, no sé si asume, pero pesa fuerte
ML: Lo que sucede es que su temperamento, su proximidad al vértice del poder para mantenerlo en los términos formales, hay un presidente único no es colegiado; evidentemente es una imagen muy fuerte. Lo que no tiene nada de malo, en la medida en que no se produzcan desvíos y contradicciones. No tiene nada de malo porque lo que llaman secretos de alcoba, estas cosas se conversan. De modo que diría que no hay que asustarse por eso, que forma parte de la realidad de la vida.
MHG: Hablemos de la vida argentina. Se habla de una inflación que supere lo previsto. Aquí mismo en Santa Fe, al igual que en San Luis, se ha marcado un índice diferencial. El 4,2% probablemente sea lo más parecido a la realidad. Esa proyección adónde nos lleva? Cómo terminamos el año?
ML: Creo que esto es lo que pretendió Lousteau con sus siete u ocho iniciativas, si esto no se corta con dos capítulos, uno tomando medidas y otro generando expectativas favorables, credibilidad como se dice en economía, esto puede resultar muy traumático. Hago votos para que el nuevo ministro lo tenga claro. Una parte del capítulo son las medidas en sí. El otro capítulo es generar la confianza necesaria. En 1926, en Francia, Raymond Poincaré, llegó al gobierno, había inflación, enfrentamientos en los frentes sociales. Llega este tipo, que era un hombre respetable y respetado, vinculado a los negocios, era tal la confianza que despertaba, que el franco se estabilizó antes de que el firmara los decretos pertinentes. Espero que el nuevo ministro, tenga la fortuna de darse cuenta que son dos cosas, las medidas y la credibilidad, las que van a combatir la inflación. A veces tenemos, temerariamente, la idea que la inflación y su combate es un invento del FMI. Eso no es así, porque en los años 30 en Argentina, Pinedo tuvo un plan que contemplaba el problema de la inflación. El siglo XIX está lleno de ejemplos, Rosas y otros contemplaron el tema de los precios. Lo que hay que tener claro es que hay que hacerlo con habilidad, convocando a todos los sectores, no profundizando la crisis con el campo. Creo que puede funcionar, sobre todo si se detiene un poco la demanda mundial de algunos de los productos que nosotros exportamos, cosa que va a suceder, ya se vislumbra un ajuste de la economía mundial, aunque no se sabe a cuanto llega.
MHG: Qué medidas habría que aplicar?
ML: Lo primero que habría que hacer es tranquilizar el tema con el agro. La Sra. Presidenta debería, y esto no sería ningún síntoma de debilidad como lo acredita la historia, los grandes estadistas han sabido decir “esta bien, me la banco, hagamos en parte –tampoco se puede ceder todo- lo que los chicos del agro quieren” y que los chicos del agro sepan que aquí hay un desafío donde está en juego la estabilidad emotiva, política, económica y financiera del país. No es un partido en donde hay que ver quien gana jugando a las bolitas, es un tema en el que estamos en el medio casi 40 millones de argentinos, y hay facturas pendientes: no hay infraestructura adecuada, que una parte de lo que se retiene al agro se destine al transporte por ejemplo por ferrocarril, que no contamina, más barato, -en Rusia el 80% del transporte de carga se hace por ferrocarril-. En segundo lugar debemos asegurar un equilibrio en el presupuesto, un superávit, pero cuidado: el enfoque contable no tiene nada que ver con el enfoque económico-financiero. Un enfoque contable dice: entran 100 y gasto 90, tengo un superávit del 10%. El problema es qué hacemos con el gasto. Esto no lo hicimos. El amigo De Vido debió haber fortalecido con el superávit la infraestructura energética por ejemplo. Teniendo en cuenta como viene la cosecha y la demanda mundial de granos, si pasamos de 90 a 100 millones de granos, tenemos que tener una estrategia ferrovial y de vías navegables en donde las barcazas más grandes vayan tranquilas, suban y bajen. También hay que tener en claro que se debe importar, no con eso quiero poner el control de cambio, pero están las reservas y hay un sector de oferta donde se puede meter un shock de oferta, -lo cual no es un invento ni de los liberales-, lo hace cualquier país del mundo: las reservas se usan en parte para pagar deudas, en parte para tranquilidad por razones psicológicas y en parte para importar cuando hay un producto que escasea y me quiebra el índice de precios. Hay que tener una diplomacia comercial. Cuando veo los empresarios que van en bandada acompañando al Presidente, o a un ministro, o a un secretario en delegaciones al exterior, y me dan risa, con excepciones, porque me parece que algunos sólo viajan para conocer Pekín y nada más. En una palabra, hace falta una gran campaña, una gran empresa ofensiva nacional donde el ejemplo de austeridad, de rigor lo dé el Poder Ejecutivo, y después esté en condiciones de exigir y de apretar a todos los sectores que se hacen los pícaros.
MHG: Hemos vuelto a utilizar términos como oligarquía calificando así a los 500 ó 600 mil productores rurales…
ML: Esto es algo que hay que precisar, pero los políticos tampoco pueden tener el lenguaje perfecto como el que tenemos los que nos ganamos la vida con esto, pero cuando hay 5 mil, o 10 mil, o 60 mil personas a la vera del camino, con camiones, la camisa rota, tomando mate, tirados en el piso… los oligarcas viven de otra manera. Yo no le haría decir a quien asesoro, este tipo de cosas. El otro tema es creer que son los propios productores quienes incendian los pastizales en vez de guardarse el pasto para el invierno, y quemar sí los residuos en la primavera para que a los brotes no los queme la helada. Son temas que generan brechas en la sociedad, de bronca. Conflictos que en otros tiempos, han llevado a desinteligencias próximas a las guerras civiles. No es el caso nuestro. Pero hay que tener en cuenta el escenario, y somos personas informadas, cultas como para saber que la cuerda se puede tirar un poquito, no demasiado.
MHG: Cómo calificaría a nuestra economía? Buena, regular…?
ML: La economía argentina está con grandes franjas de incertidumbre. Las posibilidades de crecer están dadas, hay menor oferta en algunos renglones porque reitero: no se ha invertido, como en el tema energético…
MHG: Incluso el electo presidente de Paraguay, Lugo, pone en duda el tratado de Yaciretá, represa de la cual nosotros absorbemos el 16% de toda la energía…
ML: Esto demuestra también la precariedad diplomática tradicional, no me refiero sólo al actual ministro de Relaciones Exteriores. Porque cuando Lugo dijo esto, Lula –que tiene un gran respaldo diplomático- lo “acostó” y le dijo: “acá no se revisa ningún tratado”. Porque Lula está actuando como un estadista, está mirando el escenario internacional, cosa que nuestro país no hace desde décadas –dejando de lado algunas etapas-. La Argentina no es considerada internacionalmente, ha dejado de tener la envergadura que supo alcanzar con ministros de gran talla como Drago, Felipe Arana. Manuel Dorrego Sarratea, el General Guido, Manuel Moreno, Saavedra Lamas, Oscar Camilión. Estos tipos tuvieron una concepción de la Historia, lo que es esencial para aplicar la diplomacia. Me parece que hay que volver a los manuales para darse cuenta que una Argentina fuerte, necesita por ejemplo Fuerzas Armadas disuasivas, como tiene Chile, país que acaba de comprarse la mejor flota aérea del mundo y tiene a Bachellet que es socialista.
MHG: Me parece que el tema no pasa por las medidas y las recetas económicas, que Argentina las tiene-, sino en la miopía, empecinamiento o tozudez en querer hallarlas…
ML: Pero con eso no llegamos a ningún lado. El caso más elocuente es Frondizi, que cuando arregla con el FMI el 4 de diciembre de 1958 y toda la izquierda que lo había seguido, los nacionalistas –entre los que me contaba- nos volvíamos locos y pensábamos “¡qué hizo este tipo!”, y lo decíamos así, irreverentemente. Y cuando uno ve con la perspectiva del tiempo, se da cuenta que Frondizi fue lo mas grande que nos pasó, y se dio vuelta. Porque se dio cuenta que el mundo aquel de la Reforma del 18, el mundo aquel que derogó la Ley de Residencia que para la derecha era importante porque respondía a un tiempo, principios del siglo 19, en donde era necesario tener un instrumento para evitar la invasión de tipos indeseables, era el pasado. Y lo hizo. Junto a Frigerio, arreglaron con Perón. Frondizi estableció las bases de una Argentina desarrollista, que quería decir entrar en otra instancia superior del capitalismo, donde las inversiones físicas eran grandes, en minería, industria automotriz. Estableció un nuevo rol para con Estados Unidos… Nosotros descubrimos las cosas tardíamente, porque no somos muy afectos a ver que pasa en el mundo… A mí nadie me convoca para que hable sobre lo que pasa en el mundo, a mi me apasiona más hablar de esto que del Producto bruto Interno… pero bueno me pagan por lo segundo. Argentina es un país autista. Hay que hacer lo que se debe. Lo que se debe hacer ahora es ver como lo ha hecho Lula en Brasil, que es otro Frondizi, que hizo un giro de 180 grados, de ser un reformista izquierdozo , dirigente gremial, está haciendo un Brasil que hoy día es uno de los más importantes en el contexto internacional. Mac Cain, el candidato republicano, estando yo hace diez días en Washington, dijo expresamente: “hay que sacar a Rusia del grupo de los 8…
MHG: … y ponerlo a Brasil”…
ML: Exacto, y hacer ocho con Brasil. Tabaré, en Uruguay, pegó un salto en el vacío, y nadie puede decir que sea un conservador capitalista, deleznable… Hay que decirle a nuestros amigos del gobierno argentino que le presten atención a esto…
MHG: Hacia dónde va la economía mundial?
ML: Va a una meseta tranquila, va haber una recuperación mas rápida que lo previsto de Estados Unidos, lo ha demostrado la semana pasada con una recuperación del dólar. Europa, como vengo insistiendo hace mucho tiempo, tendrá un euro más fuerte gracias a lo financiero pero no a la solvencia económica, porque Europa no tiene una moneda común, solo adhirieron quince países, tiene una población que envejece a tasas econometritas, tiene una invasión de inmigrantes más allá de lo que necesita, porque la necesita; ponerse de acuerdo todos en Bruselas es una locura… En cuanto a China, acá se olvida que la mitad de las exportaciones de China son de multinacionales, que la matricería es norteamericana básicamente, que los chinos están conforme con eso, la vida universitaria es más parecida a la de Estados Unidos que a la Argentina, hay que pagar, hay grandes institutos,… no estoy bogando por esto, estoy contando la realidad que acá no se conoce. Me acuerdo que en una reunión universitaria, propuse pagar $ 10. cada uno para tener una buena biblioteca… perdí 99 a 1. La nostalgia argentina, que tiene mucho de tango, paraliza…