“¡Vamos por las 600 promesas incumplidas del socialismo!”
Dr. Juan Carlos Mercier: – Senador departamento La Capital (PJ)
MHG: El 5 de febrero se realiza el congreso del partido Justicialista. En su caso la intención es llegar con todo el arco del justicialismo por dentro y elegir a quien va a representar al partido?
JCM: Sí, claramente esa ha sido mi opinión desde siempre, he sido muy crítico con lo que nos pasó dos años atrás, en particular con lo que ocurrió en la ciudad de Santa Fe donde la división del justicialismo provocó que se perdieran las dos principales ciudades, tanto Santa Fe como Santo Tomé, incluso se pude mencionar a Laguna Paiva. En alguna medida esa actitud de algunos compañeros de generar una postulación por separado del justicialismo, permitió que con un treinta y pico por ciento de los votos se ganaran las ciudades citadas y el justicialismo con más votos, hoy está en la oposición. Eso me parece que es una lección que debemos aprender y entender que por encima del Partido Justicialista no hay otro partido, lo que hay dentro del partido son opiniones divergentes que se deben dirimir en las internas partidarias si es que no se da la figura del consenso. A eso me he referido en estos dos años y por eso voy a tratar de trabajar en el próximo congreso del partido.
MHG: El dip. Agustín Rossi pide que todos apoyen la candidatura de Cristina, qué opinión tiene al respecto?
JCM: Me parece que es un prerrequisito inconveniente que no facilita la unidad del justicialismo santafesino. Él tiene todo el derecho, más adelante, de defender la postulación de quien considere conveniente a nivel nacional, como lo haremos todos los justicialistas de Santa Fe, quienes hemos estado trabajando con (Carlos) Reutemann, hemos dado claros señales, sobre todo a partir del fallecimiento del esposo de la Presidenta, de la oportunidad y la necesidad de facilitarle la acción de gobierno en estos meses de transición entre la realidad preexistente, no solamente como cuestión familiar, sino como cuestión de gestión de gobierno. Pero lo que no podemos es anteponer el proyecto de interés de todos los santafesinos, que es lo que vamos a dirimir en las próximas elecciones, y que se nos aparte de esa necesidad que tenemos de recuperar el gobierno de la provincia por una estrategia nacional que vendrá después y trataremos que el justicialismo sea gobierno a nivel nacional.
MHG: Usted representaría al Peronismo Federal o éste se deshilachó en la provincia?
JCM: No le pondría ningún rótulo, yo digo que los peronistas dentro del partido tenemos que elegir los candidatos que sean posibles para que el interés de todos los santafesinos y el bien común de todos ellos esté representado a través de un dirigente peronista y que tenga la capacidad de llevar adelante un frente o al movimiento nacional justicialista en la provincia. Sin rótulo alguno, el PJ encabezando ese movimiento sin aditamentos.
MHG: Cuáles serían en esta ocasión las diferenciaciones o por qué debiese votarse por usted y no por cualesquiera de los otros candidatos?
JCM: Yo no hablo de los demás porque son suficientemente idóneos y capaces. Un dirigente que tiene trayectoria, que tiene ambición de expresarla en la acción para el bien común de todos de todos los santafesinos y con vocación de servicio puede ser un candidato. En mi caso particular, lo que ofrezco es mi experiencia probada al lado de Carlos Reutemann, a lo largo de dos períodos de gestión. Además, porque y esto siempre lo he dicho, hay una capacitación, hay un conocimiento, hay un compromiso social y hay una vocación de estar cerca de la gente. Esto se traduce luego en una gestión responsable en medio de las fenomenales crisis que nos tocó gobernar la provincia. Creo que hoy en la maduración de todas esas capacidades técnicas, profesionales y políticas estoy con vocación de serlo y ofrezco a mis pares y a mis conciudadanos: por un lado, la unidad del justicialismo; pero, por otro lado, la defensa de los intereses de todos los santafesinos ante una gestión nacional que debe dar la oportunidad a Santa Fe de contar con los recursos necesarios y con las responsabilidades que debamos asumir, en consecuencia, cuando tengamos esos recursos. Es decir, sin necesidad que los mismos lleguen a la provincia por la gestión de Juan o Pedro…
MHG: El socialismo ha salido a atacar fuerte declaraciones de (Omar) Perotti cuando sostuvo que el socialismo perdió el tiempo porque no había realizado los cambios suficientes, usted cree lo mismo?
JCM: No tengo ninguna duda de que eso es así… uno advierte la actitud especulativa del gobierno provincial, por ejemplo: la necesaria obra de la avenida de Circunvalación Oeste, que se estuvo ejecutando durante el anterior período del Jorge Obeid, faltándole el 2 o el 3%, ha estado paralizada y ahora se la pone en marcha para presentarla a la sociedad como que ellos la concluyen. Los dos primeros años del gobierno de Hermes Binner fueron utilizados burocráticamente para incorporar gente, para duplicar los ministerios, para llevar a una provincia que tenía un nivel de eficacia y eficiencia de la administración de los recursos, a tener que aumentar todos los impuestos para cubrir esos gastos burocráticos y recién ahora nos denuncian que van a ejecutar 600 obras, que en la inmensa mayoría de ellas, no la va a ver ningún santafesino, van a ver sólo las maquetas y los proyectos. Y hay una realidad subyacente, de que la gente se ve frustrada por esa actitud de promesas incumplidas. Pero, además, de generación de falta de proyectos en lo social que nos hacen ver como se ha agravado claramente el problema de la inseguridad, el problema de la calidad de la enseñanza y de la tan mentada eficacia que tenían los socialistas en el área de salud y que no ha sido tal.
MHG: Si usted fuese gobernador qué actitud tendría respecto del narcotráfico, que hoy, lamentablemente, nos atraviesa en el país?
JCM: Cuando asumí la responsabilidad de ser senador, uno de los temas que le recriminaba ya al anterior gobierno de Obeid y a su ministro de gobierno y seguridad, que se debía intensificar la lucha en el campo de la drogadicción y en el sentido más amplio de la palabra, porque era evidente que acá en Santa Fe y en el resto de la provincia también teníamos delitos de suma gravedad, la mayoría de ellos seguidos de muerte, con una estadística que se manifestaba en Santa Fe como cabeza visible de los mismos y en todos los delitos aparecía la droga, ya sea el alcohol o la droga fuerte. Pensé que esta situación lo iba a resolver o a atacar con mayor eficacia el gobierno de Binner, los ministros Cuenca y su secretario Iparraguirre, el actual ministro Gaviola y el secretario que lo acompaña no están dando las respuestas necesarias. Es cierto que este es un territorio que debe ser abarcado con las fuerzas nacionales, es decir, con todos los que tienen que ver con la lucha contra la droga. Creo que este es el mal al cual hay que atacar y en los encuentros que suelo tener con los obispos del país y de mi ciudad también lo hemos charlado. El problema está latente en las zonas de mayor pobreza, este no es un problema que afecta en especial a los ricos, lamentablemente está golpeando fuertemente en los barrios más humildes. He estado recorriendo barrios de Rosario, como un club en Ludueña, o los centros asistenciales, o una reunión en un FO.NA.VI. del sur y en todos ellos aparece el tema de la droga como aparece acá. Este es un tema de política de Estado que debe darse tanto a nivel nacional, provincial y municipal, es la base de empezar por una mejor calidad de vida en los barrios más pobres.
MHG: Para llegar a esto se habla de connivencia entre pandilla y justicia y policía y poder político, usted está dispuesto a llegar a fondo con esto?
JCM: No tengo ninguna duda que hay que hacerlo, de lo contrario nos lleva puesto la droga a toda la sociedad argentina y en esto debemos comprometernos todos. Por eso digo que no es una cuestión que afecte a un nivel determinado, sino que está afectando a toda la estructura de la familia, como lo ha hecho en otros lugares del mundo. Si en esto no tenemos un compromiso firme, los resultados no se van a ver.
MHG: Los trabajos generados en la provincia casi un 70% son trabajo en negro, cuál será su postura a respecto?
JCM: Ya la tuve y todavía no me han acompañado. Lo que pienso del trabajo en negro es que es uno de los problemas fundamentales para mejorar la calidad de vida. El hombre debe tener primero trabajo; y, segundo, un trabajo digno, porque le ofrece la cobertura de la salud, y lo compromete con la educación de sus hijos y le da una pertenencia a un conjunto de leyes que le son negadas cuando trabaja en negro. He presentado un proyecto de ley que todavía no tiene media sanción. Hay que darse una política nacional y municipal conjunta, esas exenciones impositivas o esas promociones industriales o esos estímulos fiscales que tanto incorpora el Estado en todos los niveles tiene que tener como contrapartida mínima que haya trabajo en blanco. Si una empresa tiene trabajo en negro tendría que perder esos beneficios como primera instancia. Pero al mismo tiempo digo que si hacemos una política nacional, provincial y municipal en este sentido, lo que tenemos que pensar es en la reducción en la presión fiscal que se ejerce sobre el trabajo, cosa que también hemos hecho en la provincia eliminando el aporte a la ley 5110. Porque entonces el trabajador no va a ser una carga indeseada con sus aportes sociales al trabajador sino que va a tener un costo razonable. Esos mayores aportes que van a surgir de parte de todos los trabajadores en negro se van a volcar a una planilla en blanco y de allí van a surgir los recursos que van a sustituir la reducción de los aportes que me estoy comprometiendo a hacer si el empresario tiene los aportes. Esta es la estrategia que hay que darse en todo el país.
MHG: Tiene pensado quién lo acompañaría en la fórmula y en los lugares más expectantes?
JCM: Lo estoy trabajando con un conjunto de compañeros, hemos estado dialogando en estos últimos días y la estrategia se tiene que dar con un compañero de la ciudad de Rosario, pero estoy pensando que, lamentablemente, y esto también lo dije con suficiente anticipación, el congreso del partido llega demasiado tarde o, en todo caso, el cierre de lista llega demasiado temprano. Y esto es un impedimento real y concreto que vamos a tener en todo el proceso eleccionario que se va a llevar adelante. Es una barbaridad que el 21 de febrero haya que cerrar listas, he propuesto en el partido y he propuesto en el senado y tiene media sanción de la cámara y el poder ejecutivo no le dio estado parlamentario, a pesar de ser el único pedido que le ha hecho el partido Justicialista, de que se pospusieran, como mínimo 30 días el cierre de listas, en razón que ellos están anticipando el proceso eleccionario. Lo normal es que, de acuerdo con la ley y la constitución, esos dos actos electorales, las internas y el cierre final, se den entre el 11 de junio y el 11 de septiembre. No sé a título de qué ley el 25 de mayo vamos a votar, se lo digo con toda claridad, y no sé a título de qué necesidad de los santafesinos el 21 de febrero tenemos que estar cerrando listas y 30 días después hay que presentar los avales. Creo que esto hay que corregirlo, hay tiempo para hacerlo, no tienen aún en claro cuál es la interacción que va a haber entre la boleta única, que de ahí también dependen las candidaturas, y el proceso que tenía diseñado el proceso electoral cuando había una boleta sábana. No es menor esta cuestión a la hora de elegir quienes vamos a ser los integrantes de las distintas listas. Me parece que en esto el poder Ejecutivo está actuando con una liviandad peligrosa para garantizar la transparencia del proceso electoral.
MHG: Será que las realidades del Frente y del PJ son distintas?
JCM: Sí, no sé si hoy por hoy es tan distinta. Creo que el Frente tiene problemas con el “dedazo” de Binner, que lo aplicó en una primera instancia, desprestigiando la Ley de Lemas, para facilitar el “dedazo” y no para hacer un proceso democrático interno en el Frente. Creo que hoy ese escenario no es el mismo y entonces no sé si dentro del radicalismo y del socialismo y del resto de partidos que lo conforman están viendo con preocupación la preocupación que yo le manifiesto.
MHG: Cuánto va a pesar la ausencia de Reutemann en estas elecciones?
JCM: Por lo que he hablado con él su presencia se daría recién a partir de que esté definido el candidato por el justicialismo en las internas. Obviamente cada uno deberá ponderar sus virtudes y defectos ante la sociedad toda. Nosotros anhelamos que Reutemann no esté ausente, todo lo contrario, que se constituya como lo es: un líder en la provincia a la hora de apoyar al justicialismo en el proceso electoral final.
MHG: La mirada que usted tenía como ministro y ahora como candidato cambia toda o en parte?
JCM: Lo que cambia es el enfoque, uno tiene que ampliar el enfoque. Cuando uno tiene un ministerio o dos, como en el caso mío, focaliza más la mirada en lo específico. Desde le punto de vista de ejercer una gobernación uno debe involucrarse en todos los aspectos del campo político y en ese sentido tiene que tener una mirada más amplia y globalizadora. No sólo en los temas a tratar, sino y fundamentalmente en lo regional. Por eso me he ocupado de estar en la ciudad de Rosario y en el interior de la provincia, que me va dando una visión más amplia de cuáles son las necesidades de nuestra provincia.
MHG: De uno a diez cómo está hoy la provincia?
JCM: La provincia tiene que estar en un cinco porque la verdad es que en este último año a base de nuevos impuestos y de nuevas tarifas han logrado mínimamente reducir el déficit financiero que habían generado en los dos primeros años. Pero la gestión como tal en relación a metas y objetivos a cumplir es lamentable. En ese sentido lo que uno le puede dar de puntaje por haber corregido la situación financiera, lo pierde claramente en el campo de las realizaciones y llegaremos a fin de año con 600 promesas incumplidas para el próximo gobierno. Lo cual no va a ser poca cosa.